miércoles, 4 de abril de 2012

Poderoso caballero es Don Dinero


Miércoles 4 de abril, Miércoles Santo en España, pero un día cualquiera del calendario en Holanda. Aunque yo tendré Lunes de Pascua, ¡es lo que hay!
Vuelvo a demorarme en escribir, y esta vez la excusa podría ser que estoy economizando en las teclas del pórtatil y sus correspondientes píxeles.

Como era de esperar, a fecha de hoy, aún no he recibido ni un céntimo de la Beca de Ayuda para estudiantes Erasmus. Debate en el que prefiero no entrar, ya que me encuentro en una clarísima situación de desventaja y no tengo conocimiento de la popularidad de este blog…

Sin embargo, sin intención de provocar ningún tipo de sentimiento de empatía, os contaré algunos trucos a tener en cuenta para sobrevivir con los bolsillos ligeritos.

Todos conocemos de primera mano las famosísimas y exitosas “marcas blancas” en España. Podemos percibir ciertas diferencias de precios entre “productos blancos” y otros de marcas, sin apenas influir en la calidad de los mismos. En Holanda es considerablemente distinto. Aquí, los estudiantes llamamos a esos productos, “marcas rojas”, pudiendo apelar al color de su envoltorio, al de los números de nuestra cuenta bancaria, o al de nuestra cara cuando nos los estamos comiendo.

Y no es por ser exigente, pero los productos de la “marca roja” (Euro-shopper), tienen muy pero que muy pocos detalles. Eso sí, todo lo que necesites para tu vida cotidiana lo puedes encontrar de dicha marca. Sin ir más lejos, los pañuelos de papel. ¡15 paquetes de 10 unidades por tan sólo 0.80 céntimos! Claro que en el segundo uso empiezas a necesitar cremita hidratante para la zona irritada, que también la puedes comprar de la “marca roja” por menos de 1 euro. Claramente, se trata de una estrategia de mercado de lo más inteligente.
(Pañuelos de papel)

Otra de las peculiaridades de los productos Euro- shopper se encuentra en el tamaño. Me hace pensar que el modelo de familia holandesa debe estar compuesto por la madre, el padre y unos siete u ocho hijos de media. Fruto de esta sospecha puede ser la venta de packs de 24 salchichas por 0.99 céntimos o paquetes industriales de pasta por 0.70 céntimos. Esto último es bastante cómodo, sin embargo si quieres que tu compra de salchichas sea rentable, debes innovar en tu menú diario para terminarlas antes de la fecha de caducidad (otra peculiaridad a tener en cuenta). De este modo, puedes comer revuelto de salchichas, salchichas con huevo y arroz (comúnmente conocido como arroz a la cubana), perritos calientes o lentejas a la alemana (nueva receta con salchichas).

También es importante realizar la lista de la compra en función del menú semanal. No es aconsejable comprar “sin conjuntar” las comidas, porque cuando te das cuenta tienes el frigo lleno (algo que no es muy complicado si lo compartes con 9 personas), y no tienes ni una triste cebolla para picar, o unas miserables patatas para acompañar.

Quizás esto a las madres de todo el mundo no les pille por sorpresa, pero para alguien como yo, es un reto diario que empieza a ser más difícil de superar que el mismísimo idioma de este país.